Las pólizas de Reponsabilidad Civil, además de la propia cobertura de RC, suelen incluir una cobertura muy importante: la defensa jurídica. Te ofrece protección jurídica de abogado y procurador tanto si un tercero te reclama por las actividades profesionales o personales que estén amparadas bajo el paraguas de la póliza de RC. Si tienes dudas sobre qué tipo de póliza de Responsabilidad Civil puedes contratar, pincha aquí y te lo explicamos todo.
Defensa jurídica
La cobertura de defensa incluye los gastos de abogado para el supuesto de que un tercero te reclame algún tipo de daño que hayas ocasionado con tu actividad. La actividad puede ser profesional o personal, existiendo pólizas de RC profesional y pólizas de RC personal para nuestra vida privada. Los daños que te puede reclamar un tercero son:
- Daños materiales causados a cosas. Los daños se producen sobre cosas materiales. Este tipo de daños son indemnizados o reparados.
- Daños corporales a una persona. Los daños los reciben las personas, que serán indemnizadas.
- Perjuicios económicos y empresariales. Si causamos daños por nuestra negligencia o error (por ejemplo un abogado que deba presentar un escrito y se le pase el plazo).
Si no se llega a un acuerdo con el tercero y debemos ir a juicio, necesitarás un abogado que defienda y reclame tus intereses. Los gastos de ese abogado y del procurador en caso necesario son los que abonará la aseguradora si tienes contratada esta cobertura.
Libre elección de abogado y procurador
Según el artículo 76 d) de la Ley 50/1980 de Contrato de Seguro, el asegurado tendrá derecho a elegir libremente el procurador y abogado que hayan de representarle y defenderle en cualquier procedimiento. Por lo tanto, es un derecho del asegurado, que puede elegir qué abogado y procurador va a defender sus intereses. Según la propia ley del seguro, estos profesionales de libre elección o designación no tienen por qué seguir las instrucciones de la aseguradora.
Normalmente, la cobertura de defensa jurídica y reclamación de las diferentes pólizas suele incluir cobertura ilimitada si llevas abogados de la aseguradora y hasta un importe si escoges tu propio abogado. Esto es totalmente legal, la aseguradora cubrirá todos los gastos si llevas un abogado que tiene acuerdo con ellos, mientras que si escoges tu propio abogado según el artículo 76 de la ley del contrato del seguro, abonará la factura hasta un importe determinado, que suele ser de 1.000€ a 3.000€ según cada póliza. Esto quiere decir que si la factura de tu abogado es mayor que la cantidad que aparece asegurada en tu póliza en concepto de defensa jurídica y reclamación, tendrás que pagar la diferencia.
